Este paraje cuenta con amplios espacios abiertos rodeados de praderas y un excelente embalse de aguas que abastece a localidades vecinas.
Cada año, la presa acoge a numerosos amantes de la pesca. La especie más abundante es el lucio, aunque también se pueden capturar algunos ejemplares de trucha. La pesca en este embalse está abierta desde marzo a septiembre. Además, este paraje sirve de refugio para las aves migratorias que por condiciones meteorológicas adversas no pueden sortear la sierra Sálvada.